España posee un gran número de atractivos a primera vista. Desde naturaleza exuberante en el norte hasta playas de ensueño. Pero también esconde auténticos tesoros. Bajo tierra podemos descubrir impresionantes cuevas en España.
Las cuevas que debes visitar en España
Aunque existen miles de cuevas en España, hoy te descubrimos cuáles son aquellas que no te puedes perder.
1. Cuevas de Altamira, en Cantabria
Una de las cuevas más conocidas de España debido a las pinturas rupestres que fueron realizadas en la época del Paleolítico, hace unos 14.000 años.
La cueva fue descubierta en 1879. Los dibujos representan a animales como bisontes, caballos o ciervos, aunque también se han observado algunas figuras abstractas.
Debido a su importancia histórica, fue declarada en 1986 son Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, y para evitar su deterioro, solo pueden acceder 260 personas al año, para lo que se establece una lista de espera. Eso sí, existe una réplica muy interesante, la Neo cueva de Altamira, que sí puede visitarse.
2. Cuevas del Drach, en Mallorca
Otra de las cuevas visitantes más importantes de España se sitúa en la comunidad balear. Las Cuevas del Drach se componen de 4 cavidades conectadas entre sí: Cueva Negra, Cueva Blanca, Cueva de Luis Salvador y Cueva de los Franceses.
Su profundidad es de 25 metros y su recorrido es de 2,4 kilómetros. Se ha originado por la erosión causada por el Mediterráneo al ir entrando en la cueva.
3. La Cueva de Zugarramurdi o de las Brujas, en Navarra
Envuelta en una interminable lista de misterios y leyenda por las terribles historias que sucedieron en esta zona en torno a la brujería.
Se ubican en Zugarramurdi, donde en 1610, unas 30 mujeres fueron acusadas de brujería y quemadas en la hoguera. Esta cueva es un reconocimiento a la memoria de estos hechos.
4. Gruta de las Maravillas, en Huelva
Otra de las cuevas más atractivas de España es la Gruta de las Maravillas. Fue descubierta por un pastor en 1886.
Aunque su longitud es de 2 kilómetros solo es accesible algo más de la mitad de ese recorrido. Su belleza se debe a la combinación de las formaciones de estalactitas y estalagmitas con la presencia de agua en la Gruta.
5. Cueva de Valporquero, en León
Esta cueva es una buena opción para los espeleólogos, al contar con recovecos que permiten conocer la parte más inaccesible de esta cueva.
El origen de esta formación se remonta aproximadamente un millón de años. Las aguas del arroyo Valporquero comenzaron a filtrarse por la roca caliza, y así surgió esta gran cueva y sus curiosas estalactitas y estalagmitas.
6. Jameos del Agua, en Lanzarote
Hace 5.000 años el Volcán de la Corona estalló y el río de lava que expulsó, se deslizó hacia Atlántico. El artista canario César Manrique fue el encargado de diseñar este espacio que ahora se ha convertido en uno de los principales atractivos turísticos de la isla de Lanzarote.
Llama la atención el contraste entre las piscinas de agua turquesa y la roca volcánica negra. En este lugar incluso se realizan conciertos y hay un restaurante.
7. Cueva de los Verdes, Lanzarote
El origen es el mismo que el de los Jameos del Agua. Esta cueva se asocia con una larga lista de leyendas. Fue refugio de la población local frente a los piratas en los siglos XVI Y XVII.
En este caso, el artista Jesús Soto ha sacado el máximo partido a las formaciones y los matices ocres y rojizos resaltan entre la oscuridad volcánica.
8. Cueva de Nerja, en Málaga
Descubierta por casualidad en 1959, ha sido declarada Monumento Histórico Artístico y Bien de Interés Cultural por el Patrimonio Histórico Español. Y es que las pinturas rupestres que alberga cuentan con 42.000 años de antigüedad, y son consideradas como las primeras obras de arte que se conocen en la historia de la humanidad. Otro dato curioso es que en ella se encuentra la estalactita más grande descubierta en el mundo.
Aunque cuenta con 3 galerías: la Baja, la Alta y la Nueva, solo la primera se puede visitar.
9. Cueva de El Soplao, en Cantabria
Con una gran extensión de 15 kilómetros, se pueden recorren en una visita 4 de ellos. En este caso, se descubrió por estar en una zona con actividad minera, aunque actualmente se encuentra protegida por su gran valor geológico.
Como curiosidad, su nombre es un término que se utiliza en minería para definir el aire que se percibe al calar una galería desde otra con menos oxígeno.
10. Cueva de Sant Josep, en Castellón
Esta cueva de agua subterránea en España puede recorrerse en una barca. Durante los 800 metros del paseo sobre las aguas, observarás la sala de los Murciélagos, el lago de la Diosa Diana, el Lago Azul y la galería de los Sifones. Pero la visita no acaba aquí. Esta cueva también posee el atractivo de unas pinturas rupestres que datan de hace unos 15.000 años.
En resumen, estas cuevas de España merecen una visita y sus formaciones, luces, sombras e historias permanecerán para siempre en tu mente viajera.
